En nuestra sociedad existe una idea generalizada y errónea al definir la música clásica, ya que es un tipo de música culta que fue compuesta en el llamado período clásico, que abarca desde mediados del siglo XVIII hasta principios del XIX.
Sin embargo, el término música clásica se ha extendido en la sociedad, englobando toda la música no popular que ha sido compuesta desde el barroco hasta el siglo XX. Esta generalización ha hecho olvidar que la música culta engloba la música clásica y la romántica o académica. Tiene como referentes inmediatos a Europa y sus herederos culturales, y sus creadores y ejecutantes deben estudiar para aprender el manejo del lenguaje musical, bien sea para escribir, componer o interpretar.
Comúnmente se le llama "clásica", pero los que saben, dicen que tal nombre se debe reservar para tal música, pero sólo para la que se hizo en un tiempo determinado, que se conoce como el período clásico de la música, aquel en el que brillaron Haydn, Mozart y el primer Beethoven. Se le dice también música "culta"; pero en el concepto moderno, toda música es producto de una cultura, entendiendo por ésta, el conjunto de ideas, creencias religiosas, ciencias, artes y costumbres que forman y caracterizan el estado social de un pueblo o de una raza.